Es doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires (UBA). Es investigador del CONICET y profesor regular de grado y posgrado en la UBA. También es profesor de Filosofía en la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales (UCES). Ha publicado artículos en revistas científicas y los libros Cuando el otro es Otro (con Luciano Lutereau), Lo inmediato y Las formas del deseo.
¿Por qué vivimos juntos en tiempos de extremo individualismo?
Lo vemos en TV y en los diarios, llega varias veces por día a nuestros teléfonos, aparece como preocupación en cualquier conversación: el mundo hierve y hay crisis allí donde posemos la mirada. Este libro habla de eso, sí, pero no en términos geopolíticos, sino de una manera íntima, buscando el recodo en el que una reconfiguración institucional o una grieta ideológica impactan en los lazos sociales, en el amor y en los vínculos, en esa manera única que tenemos de estar juntos aun en tiempos de extremo individualismo.
Auscultando ese presente desde la mejor tradición del psicoanálisis (Lutereau) y la sociología (Dipaola), Contactos frágiles se hace una pregunta especialmente valiosa para este momento: ¿por qué vivimos juntos? ¿Por qué “soltar” como verbo suena bien pero como modo de vida resulta insostenible? No soltamos, abrazamos, y lo hacemos contra todo pronóstico. Porque, como dicen los autores, “vivir juntos es la experiencia afirmativa de un milagro”.
Lo vemos en TV y en los diarios, llega varias veces por día a nuestros teléfonos, aparece como preocupación en cualquier conversación: el mundo hierve y hay crisis allí donde posemos la mirada. Este libro habla de eso, sí, pero no en términos geopolíticos, sino de una manera íntima, buscando el recodo en el que una reconfiguración institucional o una grieta ideológica impactan en los lazos sociales, en el amor y en los vínculos, en esa manera única que tenemos de estar juntos aun en tiempos de extremo individualismo.
Auscultando ese presente desde la mejor tradición del psicoanálisis (Lutereau) y la sociología (Dipaola), Contactos frágiles se hace una pregunta especialmente valiosa para este momento: ¿por qué vivimos juntos? ¿Por qué “soltar” como verbo suena bien pero como modo de vida resulta insostenible? No soltamos, abrazamos, y lo hacemos contra todo pronóstico. Porque, como dicen los autores, “vivir juntos es la experiencia afirmativa de un milagro”.